Caitlin Clark se convirtió el año pasado en la persona con más puntos anotados en la historia de la NCAA, con la camiseta de la Universidad de Iowa. En el último Draft de la WNBA, fue elegida en el primer puesto por Indiana Fever y muchos creían que su adaptación a la liga sería rápida y su impacto, inmediato. Pero sus desempeños han sido irregulares, ha recibido numerosas críticas y Clark sufre la desafiante realidad de su equipo.

Luego de cinco derrotas seguidas en sus primeras presentaciones en la WNBA, algunos cuestionaron su capacidad, pero Caitlin Clark fue respaldada incluso por LeBron James. Luego llegaron las primeras victorias, ante Los Ángeles Sparks y Chicago Sky, pero el récord de las Fever es de 2 triunfos y 9 derrotas. En lo individual, Clark alternó un partido de 30 puntos con, por ejemplo, el último. Ante New York Liberty, la graduada de Iowa registró 2 rebotes, 5 asistencias y 3 puntos y su equipo recibió una paliza: 104-68.

Su impacto a nivel mediático fue innegable. Las Fever, en solo 6 partidos, ya superaron el número de espectadores en su estadio que habían tenido la temporada pasada: 82.857 contra 81.336 en todo el año pasado. Pero a nivel deportivo, las expectativas no se cumplieron y sus estadísticas son ambivalentes. Caitlin Clark promedia 15,6 puntos, 5,1 rebotes y 6,4 asistencias por partido, pero también 5,4 pérdidas. Es la jugadora con más balones perdidos en la temporada. Es la segunda con más triples anotados (27), pero la 44º en porcentaje de aciertos (29,7%).

Sus colegas, a su vez, parecen empeñadas en hacerla sufrir. Ya ha tenido varios conflictos y recibido insultos y empujones, intentando sacarla de foco. Y Clark ha recibido tres faltas técnicas, dos por cuestionar al árbitro y una por un pleito con una rival. No parece estar pudiendo disfrutar al máximo su temporada de rookie en la WNBA; al menos, todavía. Tiene talento y futuro. Y, dijo, está trabajando su mentalidad: “

Cálmate y deja que tu juego hable por ti. No dejes que se metan en tu cabeza. Siento que me están golpeando. Sé que me van a dar fuerte en cada partido, pero estoy tratando de que no me moleste”.