Este miércoles, las Finales de la NBA se trasladan a Dallas, donde los Mavericks no tendrán más remedio que ganar para acortar la diferencia en la serie. Los Boston Celtics ganan 2-0 luego de dos victorias como local y ahora es el turno de Luka Doncic, Kyrie Irving y compañía, que no querrán quedar 0-3, sabiendo que nunca en la historia de la NBA un equipo dio vuelta dicho resultado en una final. Pero ni los Mavs ni los Celtics parecen enteros y no se sabe si contarán con todas sus figuras.

Por el lado del equipo de Massachusetts, uno de sus jugadores más importantes durante la temporada regular sufre una lesión “rara”, según comunicó la propia franquicia. El pívot letón de 28 años y 2,18 metros, Kristaps Porzingis, sufrió un dolor en el tercer cuarto del Juego 2 y debió salir. Luego de los estudios, aparentemente tiene un retináculo medial desgarrado, que le afecta al tendón tibial posterior de su pierna izquierda. Se trata de una dolencia extraña que solo tiene 32 casos documentados en la historia y que lo convierte en duda de cara al Juego 3.

Porzingis, que en estos playoffs ya estuvo ausente durante varias semanas por otra lesión, se mostró deseoso de competir, pero sabe que no depende de sí mismo. Aseguró que hará todo lo posible, aunque expresó:

“Es algo que dejaré en manos del personal médico. Ellos determinarán si puedo jugar o no. Pero por mi parte, como dije, nada me va a detener a menos que me digan ‘no tiene permitido jugar’. Esa sería la única razón por la que no estaría en la cancha”.

Doncic, entre algodones

Del otro lado, los Dallas Mavericks sufren, tal vez, aún más que su rival. Es que su gran figura Luka Doncic está lejos de sentirse pleno físicamente. El esloveno ya arrastraba problemas en su rodilla y su tobillo y, ahora, a ello se le sumó un fuerte dolor en su costilla. Sus compañeros dicen que jugará “aunque le corten una pierna”, pero lo cierto es que un Doncic diezmado físicamente podrá no ser suficiente para los Mavs. Un periodista de ESPN aseguró que otro jugador “estaría de baja varias semanas”, pero el 77 no quiere, por nada en el mundo, dejar pasar la posibilidad de ser campeón de NBA por primera vez.