Los fanáticos de la Fórmula 1 sin duda saltaron del sillón al conocer la noticia de que Michael Schumacher habría reaparecido en un evento social después de casi 11 años desde el accidente que le cambió la vida para siempre. Medios internacionales aseguraron que el alemán, siete veces campeón del Gran Circo con Benetton y Ferrari, estuvo en el casamiento de su hija Gina-Maria, lo que significaría un suceso tan emotivo como impactante. 

El diario Bild expresó que la de Gina-Maria Schumacher y Iain Bethke fue una boda que tuvo muy estrictas medidas de seguridad y que privilegió la privacidad familiar por sobre todo, como viene sucediendo con los Schumacher desde 2013. Los asistentes a la boda no habrían tenido acceso a sus celulares y Bild sostuvo que era “muy probable” que Schumi, que hoy tiene 55 años, hubiera asistido a la fiesta de su hija que se celebró en Mallorca.

El hermetismo alrededor de su salud

Una reaparición del 7 veces campeón de la Fórmula 1 sin duda sacudiría al mundo del deporte, dado que hace casi 11 años no se sabe mucho sobre él. Desde el accidente, su esposa Corinna y su entorno se ocupó de evitar que trascendiera información alrededor de su salud. Solo se supo que fue trasladado, en 2014 y luego de despertar de un coma de 250 días, desde Grenoble, Francia, hasta un hospital de Suiza, para mayor cercanía a su familia, que en 2019 comenzó un tratamiento de células madre y que Jean Todt, ex jefe suyo en Ferrari, lo vistió varias veces y vieron juntos por televisión carreras de Fórmula 1. Pero nada se sabe de su actual estado, casi 4.000 días después de aquel episodio en la nieve.

El traumático accidente

El 29 de diciembre de 2013, un año después de su segundo y definitivo retiro del Gran Circo, Michael Schumacher estaba disfrutando de su gran hobbie y tal vez el deporte que mejor practicaba luego del automovilismo. Estaba esquiando junto a su familia en Meribel, en los Alpes franceses, cuando sufrió un accidente en una zona que a priori no era peligrosa, pero que se supo luego que carecía de una óptima cantidad de nieve. El casco de Schumacher se partió en dos y se supo que el soporte metálico de la cámara que llevaba en la cabeza penetró su cráneo. El alemán fue internado de inmediato, le diagnosticaron un politraumatismo craneoencefálico y lo operaron dos veces en los dos días posteriores. Desde entonces, reinó el hermetismo.