Luka Doncic es uno de los mejores jugadores, sino el mejor, de la NBA. Firme candidato al MVP de la temporada, promedia 34 puntos, 9 rebotes y 9 asistencias por partido y es la esperanza de los Dallas Mavericks, que desde el séptimo puesto de la Conferencia Oeste aún sueñan con clasificar a la postemporada sin necesidad de play-in. Aún así, cuando enfrentó a San Antonio Spurs, el esloveno jugó su peor básquet.

Parece cómico decir que su peor básquet involucró un nuevo triple-doble, el octavo en diez partidos. Sus registros fueron: 18 puntos, 10 rebotes y 16 asistencias. Pero solo acertó dos de sus 12 intentos de triples y 6 de sus 27 tiros al aro. Y esos 18 puntos están lejos de los 38, 39 que había promediado en las últimas semanas. Su compañero Dante Exum declaró tras el partido:

“No importa cómo juegue Luka Doncic. Si juega increíble le harán marcajes dobles. Si juega bien también. Por lo tanto, siempre creará oportunidades para que todos anoten”.

Los Mavericks vencieron a los texanos, comandados por el candidato a Novato del Año Victor Wembanyama (tampoco jugó bien: 11 rebotes, 3 asistencias y 12 puntos), por 113-107. Pese a que Doncic estuvo errático, protagonizó la jugada más destacada del partido. Iban solo 3 minutos del encuentro y el base de los Mavs asistió a Derrick Jones Jr. con un pase inédito.

Desde el propio aro, precisamente 22 metros detrás de su compañero, Doncic lanzó un pase que acabaría siendo una espectacular asistencia. Jones Jr. tomó el balón en el aire y concretó uno de los alley-oop de mayor distancia alguna vez vistos. Lo sufrieron Devin Vasell, que no alcanzó a marcar a su rival, y Wemby, que tuvo un deslucido nivel y no fue capaz de liderar a sus Spurs a su 16º victoria en 69 partidos.

Mira la asistencia de Doncic

El pase de 22 metros a Jones Jr. (Vía: X).