Es cierto que hoy Lionel Messi es una leyenda del deporte a nivel mundial. Pero para que esto sucediera tuvo que transitar un camino arduo, largo y lleno de momentos que quedarán grabado para toda la vida en su interior. Junto al actual delantero del Inter Miami y de la Selección Argentina estuvieron varios jugadores icónicos del fútbol, especialmente en su paso por Barcelona. Uno fue Ronaldinho, quien aconsejó desde un primer momento al Rosarino, previo a su debut oficial con el club catalán.

Dinho era una de las figuras de ese equipo del Barsa. Leo llegaba como un juvenil que tenía un futuro enorme por delante. Por eso, la figura de aquel entonces de la Selección de Brasil supo tener una figura de padrino para con el argentino. En una carta que le escribió Ronaldinho a Messi, simulando un momento con ocho años de vida, donde le contó cómo fue el momento cuando lo conoció.

Dentro de la narración, el brasileño regresó en el tiempo y describió cómo fue la situación en la que se vio cara a cara con Leo. Dentro de esa descripción, relató, además, el consejo que debía darle, en modo de recuerdo: "Cuando estés en Barcelona vas a escuchar hablar sobre un chico del equipo juvenil. Usa la 10, como vos. Es chiquito, como vos. Juega con la pelota, como vos. Vos y tus compañeros lo van a ver jugando para el juvenil del Barcelona, y en ese momento vas a saber que él va a ser mucho más que un gran futbolista. El chico es diferente. Se llama Leo Messi", escribió Ronaldinho.

Y también, dentro del consejo, puso: "Le vas a pedir a los entrenadores que lo traigan a jugar con vos en el primer equipo. Cuando llegue, los jugadores del Barcelona van a hablar de él como los de la Selección de Brasil hablaban de vos la primera vez que fuiste al seleccionado. Quiero que le des un consejo. Decile: 'Jugá con felicidad. Jugá libre. Simplemente jugá a la pelota'. Y cuando te hayas ido del club, el free style vivirá en Barcelona a través de él".

Una relación que comenzó en 2003 y que los tuvo en cancha bajo los mismos colores hasta 2008. Tal fue la amistad que forjaron que, además, tuvieron la fortuna de hacerle ganar al Barcelona 4 Champions Leagues, 3 Mundiales de Clubes, 3 Supercopas de Europa, 7 Ligas, 6 Supercopas de España y 3 Copas del Rey.