Comenzaron las semifinales de Conferencia de la NBA. Los Minnesota Timberwolves están 2-0 sobre los Denver Nuggets y, en el este, los New York Knicks vencieron a Indiana Pacers por 121-117, en el Juego 1. Jalen Brunson anotó 43 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias y sigue tallando su apellido en los libros de historia. Mientras tanto, las entradas para verlo son cada vez más caras.
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Con sus 43 puntos, Brunson se convirtió en el cuarto jugador en la historia (West, Jordan, Bernard King y Brunson) en acumular cuatro duelos consecutivos de postemporada con 40 puntos o más; y es el primero en lograrlo desde Michael Jordan en las Finales de 1993. El récord lo tiene Jerry West, que con la camiseta de Los Ángeles Lakers en 1965 lo hizo en seis partidos seguidos. Además, Jalen Brunson se transformó en el primero en registrar al menos 40 puntos y 5 asistencias durante 4 partidos consecutivos de playoffs. Es el as de los Knicks, y pretende extender su supremacía también frente a los de Indianápolis
El precio de las entradas
Junto con el nivel de Jalen Brunson también fue creciendo el de la franquicia en sí. Los Knicks de Josh Hart y Donte DiVincenzo viven una gran temporada, en la que finalizaron segundos en su Conferencia y en la que igualaron varias marcas históricas. Pero eso tuvo su costo, y lo sufren los fanáticos neoyorkinos. Los precios de las entradas para ver a los Knicks en el Madison Square Garden se elevaron y mucho: el Juego 1 costó 441 dólares, el Juego 2 costará 417; el Juego 5, 502 y el Juego 7, 641.
Lo llamativo es cuánto más baratos son los tickets en Indianápolis. Tanto, que algunos aficionados de los Knicks consideran viajar para alentar a su equipo, ya que seguirá siendo más económico que una entrada en el Madison. Para acceder al estadio de los Pacers, los precios serán los siguientes: 105, 108 y 82 dólares, en los Juegos 3, 4 y 6. Los fanáticos de Brunson y compañía han demostrado toda su fidelidad y parecería que no se perderán ningún juego, cueste lo que les cueste. Ya lo sufrieron los Philadelphia 76ers en la última serie, en la que los Knicks eran prácticamente locales, aunque se jugara en Pensilvania.