La llegada de Lionel Messi al Inter Miami tiene un principal responsable: David Beckham. El empresario, quien es el dueño y presidente del club de Estados Unidos, junto a Jorge Más, pudo cumplir un desafío difícil en el ámbito deportivo: sacar al astro argentino del continente europeo y llevarlo a Norteamérica. Y, como si fuera poco, hacer que el 10 y su familia estén felices.

Desde la llegada del rosarino a Miami, la relación con Beckham tiende a mejorar en cada instante. Su esposa, Antonela Roccuzzo, y sus hijos, Thiago, Ciro y Mateo, tienen un vínculo excelente con Victoria Beckham y su entorno. El rostro del británico se enrojece cada vez que está cerca de Leo y los suyos. Y cada vez que puede, le expresa su cariño. Tal como lo hizo en la última entrega del balón de oro, en París.

Messi, el "culpable" de una mala noticia dada por Beckham

Pero no todo es color de rosas en la relación entre Messi y Beckham. El ex jugador de Inglaterra utilizó su cuenta de Instagram para compartir una imagen donde se lo vio junto a una pequeña cabra que encontró en el campo y que, según se supo, su hija Harper quería llevársela a su casa. "Encontré un amiguito en el campo. Y no, Harper Seven, lo siento, no podemos quedárnosla. Tenemos suficientes GOATS ahora mismo", dijo Beckham, con un juego de palabras en referencia al 10, ya que GOAT, en inglés, significa cabra. Sin embargo, la sigla GOATS se refiere al acrónimo de Greatest of all time. En español, el mejor del mundo.