¿Cambió su suerte? Los San Antonio Spurs ganaron tres partidos consecutivos en los últimos días y frente a rivales para nada débiles: vencieron a los Phoenix Suns, Utah Jazz y New York Knicks. Aunque siguen en el último puesto de la Conferencia Oeste, los resultados despiertan algo de ilusión en los fanáticos texanos. El responsable de la remontada tiene nombre y apellido: Victor Wembanyama. Pero los éxitos tuvieron una contracara: la NBA multó al novato estrella por inconducta.

Frente a los Knicks, los Spurs firmaron una trabajosa victoria en su estadio, para la que fue necesaria el tiempo extra. Jalen Brunson, de los neoyorkinos, se llevó (casi) todos los flashes al anotar ¡61 puntos! Aún así a su equipo no le alcanzó y perdió 130-126. Del otro lado, Devin Vassell anotó 23 puntos y secundó a un Wemby que registró unas cifras increíbles: 20 rebotes y 40 puntos. Desde 1993, cuando lo hizo Shaquille O´Neal con la camiseta de Orlando Magic, que un jugador en su año de rookie no reúne tan altas estadísticas.

En la última jugada del encuentro, a falta de solo unas décimas, Wembanyana robó un balón con el que sentenciaba la victoria. Lo abrazó, el silbato sonó y luego de saludar a un aficionado arrojó la bola a las gradas. Dos días después, la NBA confirmó que aquello significaba una sanción para el francés:

“Victor Wembanyama ha sido multado con 25.000 dólares por lanzar el balón del partido a las gradas de espectadores”, dijo en el comunicado Joe Dumars, vicepresidente ejecutivo de la NBA.

Se trata de la primera sanción económica de Victor Wembanyama en su primer año en la NBA. Y, argumentando buenas intenciones, se justificó. “Sé que a los jugadores les han multado antes por tirar la pelota a las gradas, pero lo hicieron con malas intenciones. Yo sólo lo hacía para alegrarle el día a alguien. Fue algo gracioso”.

Por este motivo multaron a Wembanyama