Michael Jordan compró, en 2010, la mayor parte de las acciones de los Charlotte Hornets de la NBA. Luego de 13 temporadas de malos resultados, hace algunos meses vendió varias de ellas y se quedó como accionista minoritario de la franquicia. Se cree que, entre las razones que lo llevaron a su decisión, aparecen varias inconductas de sus jugadores, incluida su estrella LaMello Ball.

Montrezl Harrel, el pívot que actualmente juega en Philadelphia 76ers, pero que compitió para los Hornets la pasada temporada, fue arrestado, en mayo de 2022, por una infracción automovilística. Pero, además, al revisar su vehículo, le encontraron más de 2 kilos de marihuana y corrió riesgo de cinco años de cárcel. El jugador Miles Bridges, por su parte, agredió a su pareja y recibió una orden de alejamiento de la Justicia y 3 años de prisión con libertad condicional.

Hay otros casos, como el de James Bouknight, quien fue arrestado por conducir bajo efectos de droga y fue multado con $2.500 dólares. Además, lo hallaron inconsciente y con un arma dentro de su coche. El caso de mayor trascendencia es el de LaMello Ball, puesto que se trata de la mayor figura de la franquicia. El base fue capturado en algunos videos conduciendo a excesiva velocidad y no respetando los semáforos; inclusive, casi choca uno de sus autos.

Otro jugador de comportamientos desacertados y que puede haber influenciado a Michael Jordan a la hora de vender sus acciones es Kai Jones. El de Bahamas no cometió un delito, pero infringió algunas reglas de la NBA, al solicitar su traspaso en Twitter, y se comportó poco éticamente en redes sociales. Y existe otro caso de enorme gravedad: Brandon Miller fue demandado por estar presente en un tiroteo que acabó con la vida de una mujer; y el arma homicida habría salido de su vehículo. Demasiados problemas para una franquicia cuyos resultados tampoco ayudaron, y de la que Michael Jordan quiso dar un paso al costado.