Dale Earnhardt Jr. quien es una leyenda en el mundo de NASCAR,  contó en un episodio del pódcast Audiodrama como fueron sus primeros recuerdos de las carreras, pero nadie esperaba la triste historia que contaría el piloto.

“Mis padres se separaron y viví con mi mamá hasta 1981. Y nuestra casa se quemó, vivíamos en esta pequeña casa en Kannapolis. Me desperté una mañana y la cocina estaba en llamas, así que ella estaba arruinada y tuvo que entregar la custodia de mi hermana y la mía a mi papá. Nunca vimos a papá, recuerdo que tal vez estuve en su casa un fin de semana, entonces realmente no lo conocía, fue realmente extraño”.

Dale Earnhardt Jr., que en ese momento tenía 6 años, de repente se encontró viviendo en el garaje de su padre con todas sus cosas y las de su hermana Kelley. Y no pasó mucho tiempo después de ese momento que estuvo expuesto al trabajo diario de su padre. “Empezamos a ir al hipódromo. Cuando estuve en el hipódromo pensé: Esto es genial, esto es divertido, correr es increíble”, recordó.

Aunque Dale Earnhardt Jr. nunca ganó un título de la Copa, su influencia e impacto en NASCAR es innegable. Y esa fue la razón, junto con sus hazañas en la pista, por la que fue incluido en el Salón de la Fama de NASCAR en 2022.

Podría decirse que este fue el momento más importante de la carrera de Junior, pero también fue un momento en el que se preguntó cómo reaccionaría su difunto padre el gran Dale Earnhardt Sr.

"Haría cualquier cosa para escuchar lo que piensa sobre todas las cosas que hemos hecho y todo en lo que hemos estado involucrados. Haría cualquier cosa para saber realmente cuáles serían sus palabras", dijo Junior.