Hace algunos meses, se especulaba mucho alrededor de a quién podría representar Joel Embiid, pívot de los Philadelphia 76ers y último MVP de la NBA, en los Juegos Olímpicos de París 2024. Dado que nació en Camerún, pero vivió mucho tiempo y tiene familia en Francia, y que hace casi una década que reside en Estados Unidos y es parte de la NBA, cualquiera de esos tres países podía capturarlo de cara a los JJ.OO. Embiid optó por la selección de Steve Kerr, pero para ello debió traicionar a Emmanuel Macron.
Te puede interesar
Resulta que en 2022, cuando Embiid estaba intentando conseguir su nacionalidad francesa, le escribió una carta al presidente de dicho país, alegando que necesitaba su ayuda para gestionarla. A cambio, le aseguró que quería representar a Francia como jugador y que deseaba competir con ellos en los próximos Juegos Olímpicos. Macron, como todo el país, se ilusionaba con la posibilidad de reunir a Rudy Gobert, Victor Wembanyama y el propio Embiid: “Conozco su sincero interés por el baloncesto y su desarrollo y, en general, por el deporte que honra a Francia”, comenzaba el escrito.
Luego, la concreta solicitud del pívot: “Tras conversaciones con la Federación Francesa de Baloncesto, ya he tomado mi decisión. Me gustaría realizar los trámites para obtener la nacionalidad francesa y así poder ser seleccionado por los Blues. No deseo jugar en ninguna otra selección nacional. He remitido expediente en este sentido al Ministerio del Interior y de Asuntos Exteriores”.
Embiid le llegó a “rogar” a Macron que considere su carta. Hoy, casi dos años después y habiendo sido convocado a la selección de Estados Unidos, cuesta creer que la máxima autoridad francesa no se vea decepcionada por una suerte de traición. “Sería un inmenso honor unirme al equipo francés para participar en las próximas grandes competiciones internacionales, en primer lugar, los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2024. Mido la solemnidad de mi solicitud, lo que representa, lo que significa, pero también, en ciertos aspectos, su duración y su complejidad con respecto a los criterios habituales para la concesión de la nacionalidad. Le ruego, señor presidente, acepte el testimonio de mi más alta consideración”, concluía el de los 76ers.