Los Atlanta Hawks eligieron en el primer puesto del Draft de la NBA a Zaccharie Risacher, un francés de 2,07 metros que se disputaba la posición con su compatriota Alex Sarr. La camada 2024 no se mostró como particularmente extraordinaria (debían suceder a Victor Wembanyama, algo nada fácil) y Risacher tendrá el desafío de estar a la altura de un primer pick. Repasamos, justamente, los casos en los que eso no sucedió en absoluto.

2013: Anthony Bennett, Cleveland Cavaliers

Anthony Bennett fue el primer canadiense en ser elegido en el primer puesto del Draft de la NBA. Sucedió en el año 2013 luego de que LeBron James partiera a Miami Heat y el hueco que dejó The King no podría haber sido cubierto de peor manera. Bennett había brillado en la UNLV, pero no pudo plasmar aquello en la NBA. Promedió 4,4 puntos y 3,1 rebotes en 4 temporadas en la liga (y en cuatro franquicias: Cavaliers, Timberwolves, Raptors, Nets). El ala-pívot de 2,03 metros estuvo en el mismo Draft que Giannis Antetokounmpo, elegido en el puesto 15.

2003: Darko Milicic, Detroit Pistons

El Draft de la NBA del año 2003 fue uno de los mejores de la historia. En aquel grupo de jugadores estaban Chris Bosch, LeBron James, Dwayne Wade, Carmelo Anthony. Pero, sorpresivamente, en el segundo puesto fue elegido un serbio llamado Darko Milicic (LeBron fue el pick 1). Los Detroit Pistons lo eligieron doce meses antes de ser campeones de la NBA, es cierto, pero fue demasiado premio para Milicic, que jugó poco y nada y promedió 1,4 puntos y 1,3 rebotes. Su carrera estuvo marcada por conflictos y una cabeza que no pudo adaptarse a la alta competencia y se retiró en 2013 luego de divagar por varios equipos, pero jamás brillar.

2001: Kwame Brown, Washington Wizards

El gran error de Michael Jordan. El seis veces campeón de la NBA era jugador de los Washington Wizards en 2001 cuando llegó el momento del Draft. Y MJ convenció a los directivos de apostar por Brown por encima de Tyson Chandler, Pau Gasol o Toyn Parker (28º puesto). Pero el pívot de 2,11 nunca mostró capacidades y dejó la NBA 12 años después, habiendo superado los 10 puntos de promedio en solo una temporada. En 2008 fue traspasado (junto a otros) de los Lakers a los Memphis Grizzlies por Paul Gasol, antes de una campaña en la que los de Los Ángeles serían campeones. Un giro en el destino, ya que el español había sido seleccionado detrás suyo en 2001.