Una infinidad de sueños y anhelos pasan por las cabezas de los deportistas de alto rendimiento, desde su infancia. Miguel Layún, el Mexicano que pasó por varios equipos en su carrera, también tuvo deseos futbolísticos de cara a los objetivos que persiguió desde su niñez. Uno era poder vestir la camiseta de alguna institución europea, sin importar la liga. El lateral derecho atravesó diversos momentos complejos, desde lo psicológico y emocional, a lo largo de su profesión. Uno fue la constante agresión verbal y abucheada realizada por los hinchas del América de México. Sin embargo, aclaró cuál fue el más duro en su vida.

En una entrevista realizada por Oso Trava, contó cómo fue el crítico episodio que tuvo que atravesar al tomar la decisión de emigrar a la segunda división de Inglaterra para jugar en el Watflord, en enero de 2015. Todos lo querían en su tierra natal, y más en el club en el que estaba: "Me habló la dirección del club y me preguntó que cuánto dinero quería ganar para quedarme en el Club América, me dijeron que era un referente del equipo y no querían que me moviera, pero yo tenía una oferta de la segunda división de Inglaterra (Watford), cobrando menos del dinero que ganaba antes de renovar el contrato y yo volteé y les dije que me iba a Inglaterra", expresó.

Si bien su sueño se había cumplido en 2009, en el momento donde optó por irse a Europa y tuvo un breve paso por el Atalanta de Italia, su decisión no era una mera elección de vida. Era parte de un proceso que provenía de un pasado pensado pero lejano a la vez. Layún contó cómo fue el momento que tuvo que atravesar tras contarle a su padre la oferta que había aceptado. Pensó que iba a tener palabras de felicitaciones o de júbilo pero, sin embargo, 15 minutos después del aviso relató que tuvo varias llamadas perdidas de él. El motivo era para saber si había firmado algún papel porque creía que pondría en riesgo la estabilidad financiera de la familia.

Miguel se desilusionó. Los modos de su padre o le gustaron. Sin embargo, no dudó ni un instante en regresar al continente europeo para seguir su carrera futbolística. Y, además, para demostrarle a su familia que se habían equivocado con el pensamiento que tuvieron. "Tuvimos una discusión muy fuerte. Cuando colgué, la última frase que le dije a mi papá en esa llamada fue 'Yo no te estoy hablando para pedirte permiso, te hablé para compartirte una alegría mía. El día que entiendas eso y quieras compartir conmigo, hablamos'. Enseguida me solté a llorar. Ese día puse a mis padres en la lista de las personas a las que le voy a hablar cuando ascienda a la Premier League y les voy a decir “te acuerdas que me dijiste que no valía la pena? ahí está, logré mi sueño”, fueron las palabras que declaró Layún.