Ya atravesando su temporada número 17 en la NBA, Al Horford se ha tenido que adaptar a un rol completamente nuevo, al comenzar desde la banca la mayoría de los encuentros en esta temporada. No obstante, el dominicano sigue siendo una pieza vital para el esquema de los Boston Celtics.

Adoptando un papel similar al de Manu Ginóbili en los míticos San Antonio Spurs de los años 2000, Horford genera su impacto desde la banca. Con minutos reducidos pero mucha participación en el último cuarto para cerrar los partidos. 

Su nuevo rol

A lo largo de su carrera, Al Horford promedia una cifra cercana a los 32 minutos por partido. Pero esta temporada, el ala-pívot está promediando 26.4 minutos por noche, la cifra más baja de toda su carrera. Su corto tiempo de juego en comparación a otros años, no lo limita a ser una pieza fundamental para los Boston Celtics. El dominicano, a sus 37 años de edad, promedia 7.5 puntos por partido, 7 rebotes por noche y 37.7% de efectividad en tiros de tres.

Si bien estos datos pueden hacernos pensar que Horford ya no es considerado como vitalicio para este plantel, Joe Mazzula, entrenador de la franquicia de Boston, nos ha dejado en claro que el experimentado basquetbolista es fundamental para el cierre de los partidos. Al, ha finalizado el 90% de los encuentros de los Celtics en cancha y el equipo de Nueva Inglaterra marcha primero en la conferencia Este, solo habiendo perdido 8 juegos.

Su gran trayectoria

17 años en la liga no son para cualquiera. Mucho menos mantenerse en un altísimo nivel, en el mejor equipo de la liga a los 37 años de edad. El 5 veces All Star de la NBA nos deja en claro noche tras noche, que la edad es solo un número. Ingresando desde el inicio o saliendo desde la banca, Al Horford es un gran ejemplo de un grandísimo jugador de equipo.