El mundo del tenis, y el del deporte en sí, están conmovidos. Porque Rafael Nadal anunció que se retira del tenis profesional luego de temporadas luchando con lesiones. En un video de casi cinco minutos, publicado en X, en el que le agradece a su familia, su equipo, a los fanáticos y a “toda la industria del tenis”, el de Mallorca reveló que después de la fase final de Copa Davis en Málaga no volverá a empuñar una raqueta. Un día que pocos deseaban que llegara, pero que se veía venir.

A los 38 años, Rafa se retira con un legado indescriptible, pero que puede sintetizarse en números: 210 semanas como número 1 del ranking ATP, 22 títulos de Grand Slam (14 en Roland Garros), dos medallas de oro olímpicas (una en singles y otra en dobles), 36 trofeos de Masters 1000, récords de todo tipo sobre polvo de ladrillo y 20 años en la élite del tenis mundial. En el video, les agradeció a sus grandes rivales, mientras se veían imágenes de Novak Djokovic y Roger Federer, además de a su entorno.

En 2022, el zurdo brilló a comienzos de temporada y levantó dos títulos de Grand Slam, pero desde entonces, numerosos problemas físicos le han quitado continuidad. Y a eso se refirió: “La realidad es que han sido unos años difíciles, especialmente los dos últimos. Creo que no he sido capaz de jugar sin limitaciones que me ha llevado a tomar esta decisión".

"Me hace mucha ilusión que mi último torneo sea la Copa Davis representando a mi país. Es cerrar el círculo porque una de mis primeras alegrías fue la final de Sevilla en 20024”, se sinceró Nadal. 

Visiblemente emocionado, Nadal habló sobre su esposa e hijo y les regaló palabras de afecto "Mi mujer, Mery, llevamos 19 años juntos. Gracias por todo lo que has hecho, creo que has sido mi compañera de viaje perfecta durante estos 19 años de carrera. Volver a casa y ver cada día cómo está creciendo mi hijo ha sido una fuerza que realmente me ha mantenido vivo y con la energía necesaria para continuar". Las lágrimas del español son las de todos los fanáticos del tenis. El mundo despide a una leyenda de las raquetas, pero sobre todo a uno de los más feroces competidores de entre todos los deportes: Rafael Nadal.

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