Solo 18 partidos en toda la temporada perdieron los Boston Celtics. Los de Massachusetts fueron el equipo más abrumador de la NBA, una vez más, y se perfilaban como claros candidatos a su Anillo Nº18. Pero las asistencias de Tyler Herro y el dominio de Bam Adebayo de anoche no estaban en los planes de los Celtics y ahora la serie dio un giro inesperado.
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El juego 1 de los cuartos de final de la Conferencia Este entre los Miami Heat y los Celtics resultó en una paliza de los de Boston: 114-94. Algo similar se esperaba para el segundo duelo, anoche, ya que era nuevamente en la cancha de los de verde, pero no fue así. Los de Florida no contaban con su figura Jimmy Butler, lesionado, como durante un buen tramo de la temporada, pero lograron suplirlo. Anotaron 23 triples de los 43 intentados, solo 20 puntos en la pintura (los Celtics, 40) y consiguieron como visitantes un necesario y sorprendente triunfo por 111-101.
Jason Tatum y Jaylen Brown se lucieron con 28 y 33 puntos, respectivamente. Pero no hizo lo mismo Kristaps Porzingis y los Heat fueron colectivamente arrolladores: Bam Adebayo, 10 rebotes y 21 puntos; Tyler Herro, 24 puntos y 14 asistencias; Caleb Martin, 21 puntos; Nikola Jovic, 9 rebotes y 11 puntos; Jázquez Jr., 14 puntos. Fueron un verdadero equipo, aunque su base, Herro, se lució, tal vez, más que el resto. Con 6 de 11 en triples rompió el récord de la franquicia en playoffs.
La serie continuará con tres partidos en Miami y de pronto la gran presión la tienen los dirigidos por Joe Mazzulla. Sobre todo, porque el triunfo de los Heat les removió “antiguos fantasmas”. Los de Eric Spoelstra son el equipo que los eliminó en playoffs la temporada pasada, en el séptimo juego de las Finales de Conferencia. Jaylen Brown sabe el desafío que enfrentarán y se lamentó el que no pudieron superar:
“Parecía que no podíamos hacerlos fallar, tuvieron una noche de récord... Hicieron muchos tiros con los que normalmente nos sentimos cómodos”.