Los fanáticos de la NFL esperaban ansiosos que comenzara la temporada 2024-25 y el encuentro inaugural estuvo a la altura de las expectativas. Baltimore Ravens y Kansas City Chiefs, dos de las mejores franquicias de la liga, brindaron un espectáculo en el Arrowhead Stadium que se definió por una jugada milimétrica. Taylor Swift regresó a la liga y Travis Kelce volvió a ganar. ¿Cómo le va cuando ella está en cancha?

Patrick Mahomes se lució con 20 de 28 aciertos en pases, uno para touchdown, y 291 yardas aéreas. Del otro lado, Lamar Jackson hizo lo posible, con 273 yardas y también un pase para touchdown. Pero el duelo de mariscales fue para el último MVP del Super Bowl. Eso sí, por muy poquito. La victoria de los Chiefs 27-20, con anotaciones de Xavier Worthy e Isaiah Pacheco, no se consumó sino hasta el último segundo. En la última jugada del encuentro, con tiempo cumplido y luego de tres intentos fallidos, los Ravens intentaron un nuevo ataque para empatar el encuentro.

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Lamar Jackson se tomó unos segundos de más, pero lanzó un pase a Isaiah Likely. El tight-end saltó y tomó el balón haciendo equilibrio, los Ravens festejaron y desde afuera el entrenador John Harbaugh ya pedía una jugada de dos puntos para ganar el partido. Lo cierto es que la repetición mostró que el pie de Likely, al momento de caer al suelo con el balón, estaba fuera de la zona de anotación. Por milímetros. Era la punta de su botín. Pero alcanzó para anular el touchdown, dar por terminado el encuentro y que lo Chiefs celebraran su primera victoria de la temporada.

El efecto Taylor Swift

Los Chiefs están 1-0 y continúan con su racha exitosa que los llevó a ser campeones del último Super Bowl. La gran invitada de la noche en el Arrowhead Stadium fue Taylor Swift, pareja de Travis Kelce. La transmisión mostró en un momento una estadística que refleja cómo rinde el 87 de los Chiefs con su novia en cancha y sin ella. ¿Casualidad o motivación? Kelce promedia casi 80 yardas cuando está Taylor y 50 cuando no; 82% de recepciones y 74%, respectivamente; y 9,5 yardas por recepción contra 6,1. Taylor Swift, ¿el motor de los Chiefs?